INFORME
FINAL CASO
CAYARA
A:
Sr. Dr. Pedro Méndez Jurado
Fiscal
Supremo en lo Penal
Del:
Sr. Dr. Carlos Enrique Escobar Pineda
Fiscal
Superior Comisionado Asunto:
Investigación sobre los hechos acaecidos en el Distrito de Cayara
el día 14 de mayo de 1988, donde habrían perdido la vida aproximadamente
50 comuneros de dicho Distrito. Fecha:
13 de octubre de 1988 Tengo
el honor de dirigirme a usted a fin de informar lo siguiente: I.
Con fecha 17 de mayo de 1988, don Necias Taquiri Yanquí denunció
ante mi Despacho que a consecuencia de una emboscada sufrida por efectivos
del Ejército Peruano en las alturas de Erusco, el día 13 de mayo de
1988, en la que resultaron muertos entre otros un Capitán del Ejército
Peruano; efectivos de dicha Institución, provenientes de Huancapi y otros
lugares, aproximadamente 50 comuneros entre los que se encontraban su
hermano Zósimo Graciano Taquiri Yanqui (Director del Colegio secundario
de dicho lugar), el portero del citado Colegio, de nombre Dionisio y un
comerciante llamado Solano. Asimismo,
con fecha 19 de mayo último, doña Fernandina Palomino Quispe, Pelagia
Tueros Chipana y Antonia Apari Palomino, también denuncian, además, que
los efectivos del Ejército incluyendo los venidos a caballo de Huaya y
otros transportados en helicóptero habrían roto puertas, saqueado
tiendas y viviendas, prendido con fuego algunas de éstas, violado mujeres
y que a los comuneros de Cayara los matan a unos en el local de la Iglesia
y a otros utilizando hachas y machetes, tratando después de persuadir a
los sobrevivientes para que refieran que la matanza había sido obra de
los senderistas. Finalmente
y por telegrama de fecha 18 de mayo último, la Asociación Pro-Derechos
Humanos (APRODEH), denuncia los mismos hechos, dando una relación de
posibles víctimas, en la cual figuran 28 comuneros; solicitando se
gestione además la libertad de las detenidas Petronila Chipana Tarque y
Benedicta Valenzuela Bayo, a quienes ha detenido el Ejército Peruano. Denuncias
éstas que generaron que la Fiscalía de la Nación ordenara el 19 de mayo
último por télex de fs. 4 que el suscrito se encargue de la
correspondiente investigación, razón por la cual a fs. 5 se abrió la
misma, disponiéndose las diligencias a realizarse. II.
Tramitada la presente investigación, se han actuado las siguientes
diligencias: A.
Se han recibido las manifestaciones de: 1. Fernandina Palomino Quispe 2. Priscila Isabel García Oré 3. Fermín Darío Asparrent Taype 4. Raúl Apari Suárez 5. Pelagia Tueros de Rivera 6. Lucía Tello de Suárez 7. Petronila Molina de Sulca 8. Paula González Cabrera de Noa (ampliada 1 vez) 9. Indalecio Palomino de la Cruz 10. Martha Crisóstomo García (ampliada 3 veces) 11. Teodora Apari Marcatoma de Palomino 12.
Máximo Florencio Contreras Monzón (ampliada 1 vez) 13.
Primitiva Melgar Quispe 14.
Marco Antonio Taquiri Infante 15.
Maximiliana Noa Ccayo 16.
Delia Ipurre Noa 17.
Valeriana Ipurre Marcatoma de Apari 18.
María Huayanay de Ccayo 19.
Ciro Hayo Huayanay 20.
Julia Noa de Palomino 21.
Elsa Infante Cuba de Taquiri 22.
Victoriana Meza Cabrera 23.
Justiniano Tinco García 24.
Benedicta María Valenzuela Ccayo 25.
Gregorio Ipurre Ramos 26.
Aurora Palomino Suárez 27.
Pedro Néstor Valenzuela Palomino 28.
Cresencia Sulca Palomino 29.
Urbana Noa Suárez de González 30.
Maura Palomino de Oré 31.
Rufina Palomino Tinco de Tello 32.
Fabián Suárez Pariona 33.
Fermín Alarcón Sulca 34.
María Palomino Bautista de Apari 35.
Flavia García Suárez 36.
Antonia Ccayo Quispe de García 37.
Juana Apari Oré de García 38.
Lucía Bautista Sulca 39.
Sósima García Bautista 40.
Delfina Pariona Palomino de Echaccaya personas éstas que coinciden en afirmar: a.
Que
el día 13 de mayo último, como a las 9:00 p.m., escucharon una explosión
proveniente de la zona de Erusco (esto lo afirman los testigos signados
con los Nos. 12, 15, 19, 22, 25, 27, 29 y 30).
b. Que a dicha explosión siguió un
tiroteo de 45 minutos aproximadamente (esto lo afirman los testigos
signados con los Nos. 22 y 25).
c. Que al día siguiente, entre las
9:00 y las 10:00 a.m. es decir el día 14 de mayo de 1988, vieron que dos
helicópteros sobrevolaban, aterrizaban y decolaban de la zona de Erusco (esto
último lo afirman los testigos signados con los Nos. 2, 4, 5, 8, 10, 11,
12, 13, 14, 22, 29 y 30).
d. Que efectivos del Ejército
debidamente uniformados llegaban a Cayara (esto último lo afirman los
testigos signados con los Nos. 5, 8, 9, 12, 13, 14, 17, 19, 28, 29 y 30).
e. Que muchos de dichos soldados
provenían de la Base Militar de Huaya (esto lo afirman los testigos
signados con los Nos. 1, 5, 6, 7, 10 y 19).
f. Que los soldados que
ingresaron al pueblo de Cayara eran aproximadamente 80 (esto lo afirman
los testigos signados con los Nos. 9, 10, 14, 15 y 17).
g. Que los soldados en mención, en
la entrada del pueblo, procedieron a matar al comunero Esteban Asto
Bautista (esto lo afirma la testigo signada con el No. 10).
h. Que los citados soldados en el
pueblo destrozan la posta médica (esto lo afirma la testigo signada con
el No. 10).
i. Que los soldados rompen
puertas y saquean bodegas (esto lo afirman los testigos signados con los
Nos. 10, 12, 13 y 28).
j. Que en la iglesia del
pueblo, donde se estaba celebrando una festividad religiosa a la Virgen de
Fátima, los citados soldados dieron muerte a Indalecio Palomino Tueros,
Patricio Ccayo Cahuaymi, Emilio Berrocal Crisóstomo, Santiago Tello Crisóstomo
y Teodosio Noa Pariona (esto lo afirman los testigos signados con los Nos.
8 y 31).
k. Que entre 80 a 100 soldados,
bajaron a Ccechua (esto lo afirman los testigos signados con los Nos. 14,
15 y 17).
l. Que estaban en época de
cosecha y la población de Cayara en su mayoría había ido temprano a sus
chacras en Ccechua (esto lo afirman los testigos signados con los Nos. 6,
7, 14, 17 y 30).
ll. Que los soldados procedieron a
reunir a los comuneros que habían ido a cosechar a Ccechua, en un lugar
denominado Ccachuaypampa, entre las cuatro y cinco de la tarde (esto lo
afirman los testigos signados con los Nos. 1, 6, 7, 11, 14, 15, 17, 29 y
30).
m. Que los soldados habían detenido a
Marcial Crisóstomo de la Cruz, a quien llevaron amarrado y les servía de
guía para ir a algunos domicilios de comuneros que tenían anotados en
una lista (esto lo afirman los testigos signados con los Nos. 8, 10, 24,
25 y 26).
n. Que los soldados buscaban las
viviendas de Gregorio Ipurre Ramos y Dionisio Suárez Palomino, las cuales
las quemaron (esto lo afirman los testigos signados con los Nos. 1, 2, 4,
6, 7 y 25).
ñ. Que los soldados después de
separar a hombres de mujeres en Ccachuaypampa, ordenan que los varones se
echen boca abajo, procedieron a ponerlos a éstos pencas de tunas que
cortaron de un tunal cercano, y luego dichas pencas se las pisaron contra
las espaldas (esto lo afirman los testigos signados con los Nos. 1, 2, 8,
14, 15, 16, 17, 19, 26, 28, 29 y 30).
o. Que los soldados luego hicieron
correr a las mujeres y los niños para que abandonen el lugar (esto lo
afirman los testigos signados con los Nos. 1, 11, 14, 15, 16, 17, 19, 28 y
29).
p. Que los citados soldados luego
han procedido a matar uno por uno a los comuneros varones a quienes los
iban cortando con hacha, machete, cegadora o golpeándolos con martillo,
para luego hacerlos desaparecer por el lado de un árbol de molle (esto lo
afirman los testigos signados con los Nos. 1, 2, 6, 14, 15, 16, 17, 19,
26, 28, 29 y 30).
q. Que el día 15 de mayo último y
el día anterior, la carretera que conduce hacia Cayara se encontraba
bloqueada por los militares quienes controlaban a todos los vehículos que
tenían que pasar por dicho pueblo (esto lo afirman los testigos signados
con los Nos. 1, 5, 10, 12 y 13).
r. Que los soldados no han
permitido que los familiares de los comuneros muertos lleguen a donde éstos
estaban, cuidando los accesos a Ccechua hasta el lunes 16 de mayo (esto lo
afirman los testigos signados con los Nos. 30 y 34).
s. Que los soldados han estado
tratando de limpiar la sangre de los comuneros de Cayara que se encontraba
regada en el local de la Iglesia (esto lo afirma la testigo signada con el
No. 10).
t. Que el día 18 de mayo último en
horas de la mañana llegó a la zona que sirve de helipuerto, el General
José Valdivia Dueñas, en helicóptero, y procedió a leer una lista con
nombres de comuneros de Cayara, de quienes dijo los buscaba porque eran
terroristas, entre los que nombró a Gregorio Ipurre Ramos, Guzmán
Bautista Palomino, Justiniano Tinco García, Román Hinostroza Palomino,
Victoriana Apari, Alejandro Echaccaya Villagaray y Samuel García
Palomino, reclamando muchas señoras por sus familiares muertos (esto lo
afirman los testigos signados con los Nos. 10, 11 y 22).
u. Que entrada la tarde del citado
18 de mayo y cuando ya el General se había retirado, una patrulla del Ejército
al mando de un Oficial vestido con pantalón jean de color azul, con
pasamontañas de color negro, por la cual se le divisaba el cabello rubio,
la tez colorada, la nariz y los ojos, procedió a detener a uno de los dos
últimos citados, para detener al otro al día siguiente, deteniendo
asimismo a Jovita García Suárez, todos en Erusco (esto lo afirman los
testigos signados con los Nos. 10, 35, 36, 37 y 39).
v. Que dichos soldados que eran en
un número aproximado de 20, han tenido detenidas a estas tres personas ya
citadas, hasta el 20 de mayo último, en el local de la escuela de Erusco,
fecha en que los sacaron con destino a la puna de dicha zona (esto lo
afirman los testigos signados con los Nos. 36, 37, 38 y 39).
w. Que los familiares de los dos varones
precitados siguieron la ruta por la cual los soldados acotados se llevaron
a sus familiares, encontrando algunas ropas de Jovita García Suárez casi
a los quince días de que se los llevaran, para ubicarlos definitivamente
en una fosa en Pucutuccasa a los treinta días de que los detuvieron en el
local de la escuela (esto lo afirman los testigos signados con los Nos. 37
y 40).
x. Que el 25 de mayo en horas de la
madrugada, los soldados del Ejército se llevaron los cadáveres
enterrados en Ccechua, en acémilas, con destino a Cayara y de allí a algún
sitio desconocido (esto lo afirman los testigos signados con los Nos. 8 y
30).
y. Que los testigos cuyos números
de identificación aparecen consignados a la derecha, han visto que los
soldados del Ejército mataron a los siguientes comuneros:
Indalecio Palomino Tueros
Nos. 8 y 20
José
Ccayo Rivera
Nos. 1, 2, 18 y 19
Teodosio
Valenzuela Quispe
Nos. 1, 2, 7, 11, 26 y 29
Ignacio
Tarqui Ccayo
Nos. 1 y 2
Fidel
Teodosio Palomino Suárez
No. 16
Ignacio
Ipurre Suárez
Nos. 1, 15 y 16
Alejandro
Choccha Oré
Nos. 11, 15 y 26
Dionisio
Suárez Palomino
Nos. 1, 2, 7, 26 y 28
Eustaquio
Oré Palomino
Nos. 1, 11 y 30
Teodosio
Noa Pariona
Nos. 1, 8, 20 y 32
Prudencio
Sulca Huayta
Nos. 1, 2 y 28
David
Ccayo Cahuaymi
Nos. 1, 2, 19 y 28
Artemio
González Palomino
Nos. 1, 7, 11, 15, 26 y 29
Hermeregildo
Apari Tello
Nos. 1, 11, 15, 26 y 33
Emiliano
Sulca Oré
No. 1
Alfonso
Huayanay Bautista
Nos. 2 y 11
Zacarías
Palomino Bautista
No. 1
Patricio
Ccayo Noa
Nos. 1, 7, 11, 26 y 28
Solano
Ccayo Noa
Nos. 1, 7, 11, 26 y 28
Zósimo
Graciano Taquiri Yanqui
Nos. 2 y 11
Emilio
Berrocal Crisóstomo
Nos. 8 y 20
Santiago
Tello Crisóstomo
Nos. 8 y 20
Esteban
Asto Bautista
No. 10
Aurelio
Palomino Shoccha
No. 11
Samuel
García Palomino
Nos. 37 y 40
Jovita
García Suárez
Nos. 37 y 40
Alejandro
Echaccaya Villagaray
Nos. 37 y 40 Félix
Quispe Palomino
(Falta por declarar su esposa Félix
Crisóstomo García
(Faltan declaraciones de sus
z. Que los testigos cuyos números
de identificación aparecen consignados hacia la derecha, han visto que
los soldados del Ejército han torturado durante toda la noche del 14 de
mayo último, en el local del Concejo de Cayara a los siguientes comuneros:
Benedicta María Valenzuela Ccayo Nos.
1, 23, 24 y 32 B. Se han practicado diligencias de inspección ocular: 1. Como diligencia preparatoria solicitada a fs. 149 y realizada el 21 de mayo último en los siguientes inmuebles: a.
De Gregorio Ipurre Ramos, ubicado en Cayara; vivienda que se
constató había sido totalmente quemada. b. De Lucía Tello, ubicado en Cayara, domicilio que también lo fuera de Dionisio Suárez Palomino; vivienda que se constató que tenía la puerta de ingreso rota y presentaba sus enseres quemados, habiendo llegado las llamadas inclusive al techo, ya que las vigas estaban carbonizadas, daños estimados por I./40,000.oo. c. De Primitiva Cabrera de Palomino, ubicado en Cayara; bodega que se constató había sido saqueada por los soldados el 14 de mayo último, ascendiendo el monto de lo robado a I./20,000.oo. d. De Modesto García Pariona, ubicado en Cayara; bodega que se constató había sido saqueada el día 14 de mayo último por los soldados, con un detrimento económico de I/.50.000.oo; además presentaba la puerta rota y los vidrios de los estantes también, asimismo le han robado artefactos eléctricos por I/.30,000.oo. e. De Teodosio Torres Tinco, ubicado en Cayara; vivienda que presenta la puerta violentada, los efectivos del Ejército le han robado especies por un monto de I/.30,000.oo. f. De Catalina de la Cruz viuda de Torres, ubicado en Cayara, bodega en donde los efectivos del Ejército han robado especies por I/.40,000.oo. g. De Paulina Suárez Bautista, ubicado en Cayara; depósito de productos alimenticios donde los efectivos del Ejército han fracturado las puertas y robado dinero y especies por un valor de I/.2,000.oo. Diligencia que se suspendió a las 9.00 p.m. para continuarla el día 26 del acotado mes y año a horas 2.00 p.m. h. En la Posta Sanitaria de Cayara donde el testigo Agapito Tinco Noa estuvo presente, constatándose que todo se encuentra ya ordenado, indicándose que el día 14 de mayo último todo estaba tirado, por obra de los soldados. i. En el local del Concejo de Cayara, donde se constató que ahora todo estaba reparado y recientemente pintado aunque aún no se podía apreciar que había una puerta que había sido violentada. j. En el domicilio de Apolonio Huamani, ubicado en Cayara, constatándose que la puerta había sido rota y todo tirado y rebuscado. k. En el Centro Base de Educación de Cayara; donde se constató que faltaban cinco ollas de aluminio que se indica habían estado utilizando los efectivos del Ejército. l.
De Eneida García Pariona, ubicada en Cayara, bodega cuya puerta ha
sido violentada, desprendiendo las bisagras y aldabas que son entregadas
como cuerpo de delito, sindicando a los linces del Ejército como autores
de robo de especies y artefactos eléctricos por un monto de I/.15,000.oo. ll.
Del profesor Emiliano Aquino Paico, ubicado en Cayara, donde se
encontró que la puerta había sido violentada. 2. Diligencia solicitada a fs. 215 y ordenada a fs. 216, cuya acta obra a fs. 217; realizada por el camino de herradura de Cayara a Ccachuaypampa, con fecha 11 de junio último (1988), diligencia en la cual además interviene doña Teodora Apari Marcatoma de Palomino, persona ésta que en Ccachuaypampa indicó los lugares en donde el 14 de mayo último los efectivos del Ejército hicieron sentarse a las mujeres y niños; donde hicieron echarse boca abajo a los varones; el tunal del cual los soldados cortaron las pencas que pusieron en las espaldas de los campesinos varones, tunal que presenta huellas de cortes relativamente frescos; el árbol de molle, por cuyo lado los soldados hacían bajar a los comuneros de Cayara para matarlos con golpes de hacha, machete, segadora o cuchillo, o simplemente a golpes de martillo, indicando asimismo la parte baja del árbol de molle en mención donde indica que los soldados mataron a su esposo Aurelio Palomino Ccheccún, lugar en donde la citada testigo extrajo de la tierra piedras con manchas de sangre, las cuales proceden a separarse para la pericia correspondiente; asimismo se recogieron yerbas con marchas de sangre también para remitirlas al Laboratorio. Se tomaron fotografías a fin de ilustrar esta diligencia. De regreso por el camino de herradura con destino a Cayara, se recogieron piedras con manchas de sangre, así como mechones de cabello humano, los cuales estaban enganchados en plantas denominadas ambrancay, a una altura de aproximadamente noventa centímetros del piso, para remitirlos al Laboratorio para el peritaje correspondiente.
C. Se han practicado
diligencias de exhumación de cadáveres. 1. Diligencia frustrada por el Oficial que se identificó con el seudónimo de “Mayor Yauyos”, el 21 de mayo de 1988, en Huancapi, diligencia que fuera ordenada para realizarse en Cayara y Ccechua por resolución de fs. 121, y que fuera frustrada según acta de fs. 123. 2. Diligencia ordenada por resolución de fs. 138 y realizada el 27 de mayo de 1988, según acta de fs. 139, de la cual se aprecia se abrió una primera fosa en Ccachuaypampa donde habían enterrado sus familiares los cadáveres de Teodosio Valenzuela Quispe y Artemio González Palomino, en una chacra de propiedad de Hilario Valenzuela Tello, encontrándose en esta fosa, una vela usada, una tela blanca de cuarenta centímetros de lado impregnada de sangre, un poncho de color nogal y un costalillo de polietileno, con manchas de sangre, todo presentaba un olor fétido a cadáver, especies que se ordena se remitan al Laboratorio para la pericia correspondiente. De la segunda fosa ubicada a diez metros de la anterior, donde la testigo Candelaria Palomino Ccayo indicó que se encontraban enterrados su esposo Alejandro Cchoccua Oré con Hermenegildo Apare Tello; en esta fosa no se encontró nada pero despedía un fuerte olor a cadáver. De la tercera fosa, ubicada a trescientos metros de la anterior, en una zona denominada Ccullpapacha Huaycco, correspondiente a una chacra de Victor Bautista, donde las testigos Ernestina Ipurre Palomino y Martina Valenzuela dijeron se encontraban enterrados Solano Ccayo Noa y Dionisio Suárez Palomino, lugar en donde se encontró en el interior de la fosa un pellejo de carnero de lana de color blanca, con manchas de sangre, un trapo con manchas amarillentas y una vela de tres centímetros de largo; no había cadáveres pero sí un fuerte olor fétido a éstos, el pellejo indicó Ernestina que lo puso Martina cuando enterró los cadáveres; se dejó constancia que la presencia de la vela consumida permitía inferir que se había estado alumbrando con ésta en horas de la noche cuando no habría luz, para luego tirarla cuando se había terminado de realizar algo y no se necesitaba de seguirse alumbrando. En el camino de herradura de la segunda a la tercera fosa se encontraron dos fragmentos de hueso de cráneo humano impregnados con sangre, y prendido a una planta llamada ambrancay, a una altura del suelo de setenta centímetros, una porción de cabello humano; así también y en el piso se encontraron mechones de cabello humano y cinco casquillos de bala, todo lo cual se levanta para remitirlos al Laboratorio para los peritajes correspondientes. De la cuarta fosa ubicada también en Ccachuaypampa, como a cuatrocientos metros de la tercera, en la chacra de propiedad de Valeriana Ipurre, la testigo Maura Noa Palomino refirió que enterró el cadáver de su hijo Eustaquio Oré Palomino, fosa que al excavarla se halló piel de una mano derecha incluyéndose la piel de los cinco dedos, piel que se dispuso que los peritos PIP tomen las impresiones digitales; al costado de esa fosa se halló una lata vacía de conserva “Grated de sardina, marca 'Timonel'”, la cual ha sido abierta en forma irregular, con los bordes hacia adentro, conteniendo en su interior residuos de su contenido; asimismo un mango roto de pala, con la que deben haber estado trabajando los que extrajeron los cadáveres de esta fosa, la cual presenta un fuerte olor fétido a cadáver. Esta diligencia se suspendió para continuarla el día 30 del acotado mes y año. En la continuación de esta diligencia el día 30 de mayo último, la cual obra a fs. 145, ya en la zona denominada Quimsahuaycco y con la compañía de la testigo Julia Noa González, ésta indicó un barrancal donde había una fosa en la cual la citada testigo indicó se encontraban enterrados Teodosio Noa Pariona e Indalecio Palomino Tueros; no encontrándose cadáver alguno, pero sí un fuerte olor fétido a cadáver; se recogió tierra húmeda para la pericia correspondiente; asimismo se procedió a recoger cabellos que estaban en hojas de cabuya las cuales presentaban manchas de sangre, que dichas manchas se presentaban solamente en las hojas que estaban hacia el lado izquierdo del camino yendo de Cayara; todo ello con el fin de remitirlas al Laboratorio para la pericia correspondiente que los cabellos se presentaban en la parte en que el camino se angosta; también se recogió un pedazo de piel corrugada de color pardo oscuro y piedras que presentaban manchas de sangre, también para remitirlos al Laboratorio. El Asesor del Ejército dejó constancia que los cadáveres habrían sido producto de un enfrentamiento con las fuerzas del orden y que seguro los habían llevado los senderistas. A 300 metros de esta fosa y en otro barrancal de más difícil acceso, la misma testigo indicó que había otra fosa en la cual se encontraban enterrados Patricio Ccayo Cahuaymi y Emilio Berrocal Crisóstomo; no se encontró cadáver alguno, pero sí una ojota negra y cabello humano que se recogen para remitirlos al Laboratorio para las pericias correspondientes. 3. Diligencia realizada el 30 de mayo último, en Erusco, y que obra en copias certificadas a fs. 172-173, diligencia en la que intervino además el Asesor Legal del Ejército, Cap. E.P. Alonso Esquivel Cornejo; diligencia de la que se infiere que en las cuatro fosas en las que se indica por parte de los efectivos del Ejército, habrían enterrado a 4 senderistas que intervinieron en la emboscada al convoy el día 13 de mayo último, y que resultaron muertos al haber los soldados sobrevivientes repelido el ataque terrorista; no se halló cadáver alguno, ni siquiera olor fétido que permita concluir que allí hubieran enterrado cadáveres, además las fosas en mención solamente presentaban un metro diez de largo por cincuenta centímetros de ancho.
4. Diligencia realizada el 10
de agosto en Pucutuccasa cuya acta obra a fs. 318, diligencia en la cual
se exhumó el cadáver de una mujer identificada de conformidad con lo
dispuesto por el artículo 173 del Código de Procedimiento Penal, por dos
de sus hermanos: Flavia y Justiniano García Suárez, como Jovita García
Suárez; asimismo Justiniano García Suárez identificó a otro de sus
parientes, llamado Samuel García Palomino, y a un conocido de él
Alejandro Echaccaya Villagaray, no identificando los restos de una cuarta
persona; exhumándose solamente el cadáver de Jovita García Suárez,
ello ante la imposibilidad de poder cargar con todos los cadáveres allí
existentes, en plena puna y con pocos medios de ayuda; habiéndose
procedido a recoger piel de dos manos y una de una planta de pie del
interior de la citada, una vez sacado el cadáver de Jovita; asimismo se
recogieron de un lugar distante a dicha fosa dos casquillos de bala,
piedras manchadas con sangre; asimismo del interior de la fosa en mención
se extrajo un sombrero oscuro con manchas de sangre, dos ojotas, una porción
de tierra y piedras pequeñas manchadas de sangre, a fin de remitirlas al
Laboratorio para la pericia correspondiente. [ Índice | Anterior | Próximo]
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